- El gráfico semanal de Dogecoin muestra una transición completada de la consolidación a una fase parabólica, señalando una aceleración más fuerte en el precio.
- El precio actual es de $0,1997, con un aumento del 4,8% en siete días, con soporte en $0,1948 y resistencia en $0,1996.
- El gráfico proyecta un posible crecimiento hacia la región de $1,50 si la tendencia parabólica actual mantiene el impulso alcista.
Dogecoin (DOGE) ha entrado en lo que los expertos denominan una “fase parabólica”, tras meses de acumulación gradual y apreciación paulatina del precio. El gráfico semanal indica un movimiento claro a través de tres etapas distintas: consolidación, slow-bull y expansión parabólica, caracterizando un patrón de crecimiento progresivo.
Según la información más reciente disponible, Dogecoin se valoraba en $0,1997, con un aumento del 4,8% en los últimos siete días, y una apreciación mínima del 0,1% frente a Bitcoin, o 0,051775 BTC. Estas cifras sitúan a DOGE muy cerca de una zona de precio concluyente, apenas por encima de su nivel de soporte de $0,1948 y justo por debajo de su resistencia de $0,1996.
La fase de consolidación define la estructura inicial
Dogecoin atravesó una temporada de consolidación prolongada con poca volatilidad y operaciones dentro de un rango entre 2022 y mediados de 2023. La actividad del precio durante este periodo formó una base subyacente, creando un soporte horizontal fuerte que serviría como plataforma para el soporte alcista posterior. Esta concentración ofreció la estabilidad necesaria tras correcciones prolongadas y los participantes del mercado se mantuvieron cautelosos pero atentos a las tendencias emergentes.
Esta etapa tuvo una zona de soporte significativa en el piso de precio bastante constante de alrededor de 0,06-0,08; la acumulación constante de fuerza fue esencial. Esa preparación allanó el camino para la fase slow-bull que se experimentó en los meses siguientes. La indecisión fue reemplazada por una acumulación gradual a medida que el mercado evolucionaba, lo que permitió un movimiento ascendente constante.
La fase slow-bull sostiene el impulso gradual
Para 2024, Dogecoin entró en una fase slow-bull, reflejando un cambio del movimiento horizontal a una estructura ascendente moderada. El gráfico semanal destaca mínimos crecientes consistentes, lo que indica una renovada presión de demanda en niveles incrementales. La fase fue una reversión alcista temprana, pero mantuvo un impulso contenido, sin demasiada volatilidad.
Durante este periodo, la pendiente de la curva de precios se volvió cada vez más pronunciada, con rupturas incrementales por encima de puntos de resistencia importantes. La estructura mantuvo la trayectoria ascendente, reflejando una acumulación saludable en lugar de subidas especulativas. Es notable que esta etapa sirvió de puente entre la acumulación a largo plazo y el posible movimiento exponencial. Con soporte continuo en torno a $0,19, la estructura de DOGE sugiere una sólida estabilidad técnica antes de fases más dinámicas.
La fase parabólica proyecta un crecimiento acelerado
El desarrollo más reciente sitúa a Dogecoin al inicio de una proyectada fase parabólica, visualmente delineada por una curva ascendente pronunciada en el gráfico semanal. Esta transición refleja un impulso de compra intensificado a medida que la estructura del mercado se alinea para movimientos de precio más amplios. Los datos de precios posicionan a DOGE cerca de un umbral decisivo de ruptura, donde un movimiento por encima de $0,20 podría reforzar un impulso alcista más amplio.
La trayectoria parabólica ilustrada en el gráfico se extiende hacia la región de $1,50, marcando un posible objetivo de resistencia a largo plazo. Observadores del mercado señalan que esta fase podría definir el próximo ciclo de varios meses de DOGE si la fortaleza alcista persiste. La secuencia consistente desde la consolidación hasta el crecimiento parabólico subraya cómo las transiciones estructurales pueden moldear el comportamiento del precio a lo largo de períodos prolongados.




